Panorama vitivinícola: ¿Se consolida el crecimiento?
Por Marcelo Lopez especial para MendoVoz
Después de tantas semanas de incertidumbre, de noticias malas o regulares y de internas casi inexplicables en medio de la pandemia -y de la necesidad de trabajar mancomunadamente en el fortalecimiento de la industria para aprovechar las ventanas de oportunidades que abre la crisis- llegó una buena noticia: los despachos de bodega al mercado interno siguen creciendo.
Durante el mes de julio, el INV registró un incremento del 21,7% en los despachos de vinos al mercado interno respecto a julio del año anterior con un volumen total cercano a los 98 millones de litros, el mejor número en siete años. En los nueve meses que van del 2020, el crecimiento de las salidas de vino de las bodegas creció un 9,4%. Un crecimiento que no registra cifras similares para un mes de despachos en los últimos siete años, datos que parecen consolidar la reversión de la tendencia.
Las causas de este crecimiento ya han sido escritas: mayor consumo hogareño y recuperación en la competitividad en los precios frente a otras bebidas. Este dato es bien claro en el informe del INV, los grandes responsables de este crecimiento son los botellones de más de un litro, la querida y añorada damajuana -que vuelve fuerte- y el bag in box que comienza a aparecer en los números tibiamente.
Está claro que el sujeto de consumo principal de la vitivinicultura argentina no es el que parte de la industria cree sino la clase media y trabajadora tradicional, que en cuanto puede recupera sus viejas tradiciones y gustos. Los números lo reflejan claramente: botella de hasta 750cm3 sin mención varietal, botellones, damajuana y tetra brik triplican en despacho a los vinos varietales en envase de hasta 750cm3.
Otro dato interesante es la estabilización del stock en valores razonables con proyección de unos tres meses a la próxima liberación de vinos del 2021, dato que también se corrobora en el mercado. Los valores promedios de los contratos sellados en la Bolsa de Comercio están $2 por arriba del mes anterior.
Las exportaciones también mostraron un nuevo repunte, pero aquí la prudencia debe ser la norma ya que el fraccionado creció un 3.9% y los graneles un 118% con el dato de que el principal comprador es España que espera para este 2020 una muy buena cosecha que ya está pronta a comenzar.
Mientras estos números traen cierta esperanza, crece una de las preocupaciones que advertimos la pasada semana. Tanto los gobiernos como representantes del sector vienen reuniéndose, informalmente por ahora, para comenzar a analizar la que se espera sea una muy problemática cosecha 2021 por la pandemia. Esta necesitará protocolos muy estrictos y tendrá seguramente muchas complicaciones para el traslado de las cuadrillas, lo que a su vez significará seguramente un fuerte aumento de los costos operativos de la temporada, que ya pone en alerta al sector.
