La cultura tomó las calles de Las Heras

Diferentes expresiones artísticas mostraron su año de trabajo en los talleres artísticos y culturales.
lunes, 11 de diciembre de 2017 · 07:43

Frente al edificio de la Dirección de Cultura lasherina, diferentes expresiones artísticas mostraron su año de trabajo en los talleres artísticos y culturales que ofrece la Municipalidad. Música, danza y arte visual conquistaron a los cientos de asistentes, entre ellos el intendente Daniel Orozco, en una cálida noche de sábado ideal para la celebración

“La espina dorsal del planeta es mi cordillera (…) soy lo que me enseñó mi padre (…) el que no quiere a su patria no quiere a su madre (…) soy América Latina, un pueblo sin piernas pero que camina”, se oía al cierre de la actuación de la Orquesta de la Municipalidad de Las Heras, en las voces centrales de Ini Ceverino, Estela Torino y Jesús Pacheco. La canción de Calle 13, Latinoamérica, bien podría resumir el espíritu de la reunión, este sábado 9 a la noche, en pleno centro lasherino.

Se trató de la celebración de fin de año de los talleres culturales que ofrece la Dirección de Cultura de Las Heras, al mando de Laura Fuertes. Un colorido y atractivo escenario copó todo el ancho de la calle San Miguel, frente al edificio municipal, para que allí se sucedieran las diferentes muestras de cada taller, desde lo musical hasta la danza y el canto. Las expresiones visuales se apreciaron en los stands de telares, crochet, pintura, dibujo y más.

Cientos de familias, en su mayoría del departamento, disfrutaron de la velada en las sillas dispuestas como platea. Entre los asistentes se encontraba el intendente Daniel Orozco junto a su mujer, Viviana Checo.

“Este equipo trabaja compenetrado con la identidad lasherina. Acá estamos viendo lo que quiere el lasherino, que quiere trabajar, que quiere progresar, superarse. A mitad de mi gestión siento que estamos cumpliendo con lo que debemos hacer, pensar a cada paso en el vecino. Y estoy feliz de ver toda esta gente reunida en pos del arte, porque el arte nos une. Estos son espacios para enseñar, y todos tenemos cosas para aprender. Eso hace al bien común”, reflexionó el intendente Orozco.

Y sus palabras se correspondían con declaraciones de algunos de talleristas y alumnos por igual, desde niños hasta adultos mayores. Inclusión, esfuerzo, superación, contención y profesionalismo resumieron el balance de este ciclo 2017 en ellos.

María Eva Guarice, por ejemplo, tiene 65 años, viste de impecable blanco con pañuelo celeste al cuello y nos cuenta que el Ballet Folclórico significa para ella “un cable a tierra”. “Este grupo de gente tan linda, y los profes tan predispuestos a enseñarnos, -relató- me ayudaron a superar la muerte de mi marido. Siempre me gustó bailar folclore pero nunca tenía tiempo para mí, y ahora gracias a este espacio logré cumplir mi sueño”.

Los profes de danzas árabes, Emiliano Hamza y Nuri Ai Sum, se emocionan al repasar este año. “Conseguimos un apoyo que antes no teníamos, la gente de Cultura se han brindado enteros a nuestros requerimientos y siempre nos alientan a ir por más en esta fantástica experiencia. Tenemos alumnos de todas las edades, vienen familias enteras. Nuestra misión principal es el fortalecimiento de las raíces árabes”, manifiestan.

Mientras en pantallas se proyectan videos con algunos momentos de las clases de los talleres artísticos, y el locutor introduce cada cuadro, cada presentación, detrás del escenario esperan con ansias y nervios los protagonistas de la noche.

A los 70, Rosa Maturano se animó a pintar. Algo que había soñado siempre. Y su profesora, Mariela Vicencio, la alentó a ir por más. “Ahora traje pintura en tela, pero el año que viene que hacer mi primer cuadro”, promete. Y destaca de estos talleres la relación social, “porque hay mucha gente de mi edad sola y esto nos une, nos hace relacionarnos y olvidarnos de nuestros achaques”.

“El arte es una buena herramienta para llegar al hogar con otra energía, con el alma más contenta. Vengo al taller y se me pasan todos los dolores”, concluye Gladys Vázquez, de 77 años y compañera de María Eva en el ballet folclórico.

Hacen señas y se disculpan. Tienen que salir a escena. Y ahí nos despedimos, dándoles lugar para brillar.