Villa Catalina, el barrio que se quedó sin salida y al que nadie escucha

Cansados de diversas situaciones que atraviesan a diario, y a las que nadie parece responder, los vecinos del barrio Villa Catalina (ubicado en las inmediaciones a la rotonda en la que confluyen Boulogne Sur Mer y Regalado Olguín, en Las Heras) dialogaron con MendoVoz para hacer oír la situación que padecen actualmente. Particularmente, un conjunto de vecinos expuso que viven a diario con un estado sanitario y de mantenimiento en las arterias deplorable; un alumbrado público deficiente y la ausencia de una vía de egreso del lugar.

Ante este panorama complejo, los moradores del lugar presentaron el 1 de agosto una solicitud en Mesa de Entrada de la Comuna aduciendo que el Municipio cortó, sin aviso previo, el acceso de salida del barrio hacia la rotonda de Boulogne Sur Mer por lo que solicitan un acceso/salida de sus hogares que no implique rodear el perímetro del barrio. Los mismos sostienen que adentrarse en los barrios colindantes podría implicar el aumento de situaciones de riesgos, debido al estado de las arterias y la posibilidad de la presencia de malvivientes en esas zonas.

“Nadie puede percibir que ante una situación de emergencia no tenemos formar de llegar con rapidez a las avenidas que nos rodean, nos han dejado cercados sin prever que ante una emergencia  los minutos son contados”, manifestó en dialogo con MendoVoz, David Ponce.

Además en el pedido al intendente Daniel Orozco incluyeron: planificar salidas rápidas y/ retornos hacia Boulogne Sur Mer (como se ha realizado en barrios cercanos);  el retiro de escombros que el Municipio ubicó frente a la entrada al barrio; colocación de contenedores de basura acorde a la cantidad de familias (en el lugar residen al menos 180 familias); repuesta efectiva ante los reclamos por cortes eléctricos y el mantenimiento del alumbrado público, entre otros.

Sucede que, indefectiblemente, los vecinos para egresar de la barriada deben realizar una vuelta de manzana considerable e ingresar a otro barrio para salir, y de ahí ocupar la vía de salida particular de una estación de servicio cercana al barrio porque no hay un acceso permitido a Boulogne Sur Mer en las inmediaciones. “Antes ocupábamos el Átomo para salir y ahora la estación de servicio, y con la proyección de las obras que van a realizar en esta rotonda el semáforo ha quedado invalidado”, expresó Betina Morelato.

Es que el Villa Catalina (un loteo que fue aprobado durante la gestión de Rubén Miranda), y los barrios colindantes, no tienen una salida directa a la Avenida Regalado Olguín ni tampoco a Boulogne Sur Mer. “Estamos pidiendo que la Municipalidad trate de arreglar esta calle y ver la posibilidad de generar un paso hacia Regalado Olguín, un retorno para conectar a la rotonda”, continuaron expresando en el lugar.

“Cuando solicitamos al Municipio una resolución a este conflicto nos dijeron que era imposible, inviable, pero no tenemos formar rápida de salir del barrio sino que tenemos que dirigirnos hasta la rotonda del barrio la Bastilla para retornar a una distancia de un kilómetro aproximado”, remarcó Valeria Leiva.

Las calles que nadie quiere

Otra situación compleja que atraviesan los moradores del barrio Villa Catalina es la de contar con arterias en estado de abandono en lo referente al mantenimiento y la prestación de los servicios básicos, como limpieza, alumbrado y barrido. En contraposición, el asfalto se percibe deteriorado por las numerosas pérdidas de agua, y el contenedor de basura -ubicado en el ingreso- colapsado de residuos cada día. 

Vale mencionar que en la normativa actual en los barrios privados los servicios públicos son brindados por la administración del lugar pero; como se da en el Villa Catalina -barrio de acceso restringido (semi-privado)- estas prestaciones deberían de ser ofrecidas por el Municipio.

“Ni un foco nos vienen a cambiar”, argumentó un vecino del lugar, al tiempo que añadió “la administración del lugar mantiene la seguridad con el cobro de las expensas, pero no hay ningún servicio más que este cubierto ni por la administración del barrio ni por el Municipio, se pasan la pelota unos a otros”.

Además, argumentaron que están en litigio con la administración del barrio que es Titulizar S.A Constructora, “nos plantean que las calles y las luminarias fueron cedidas al Municipio en el momento en el que se hizo el loteo, pero aunque pagamos los impuestos municipales la Municipalidad no presta los servicios”, remarcó David.

Las respuestas que no llegan

Desde MendoVoz contactamos a la firma encargada de la administración del lugar y dialogamos con Fernando Robero, gerente comercial de la firma quien explicó: “En el caso de Villa Catalina las calles, luminarias y ochavas donadas al Municipio; una reglamentación que fue determinada por el Ministerio de Hacienda y Finanzas de la provincia durante la sesión de Celso Jaque”, haciendo alusión a la autoridad responsable del mantenimiento de las calles.

Por otra parte, indicó que la compañía se compromete a realizar diversas gestiones como administración presentando presupuestos destinados a las reparaciones que sean necesarias realizar, pero el mantenimiento de las mismas no debería de salir del pago de expensas que solo debería de estar destinadas a espacios comunes.

“La desarrolladora del barrio ya realizo y concluyo la etapa de inversión, pero esta figurada de barrio cerrado pero con las calles públicas genera una especie de ambigüedad respecto de la autoridad competente a intervenirlas “, puntualizó Robero.

Por su parte, desde el Municipio comandado por Daniel Orozco -hasta el momento de cierre de edición- no se manifestaron respecto de la consulta de MendoVoz.