Campo y pulperías con historia

Se trata de un rancho de adobe donde nació Perón, en Roque Pérez, un pueblo a solo 130 kilómetros de Buenos Aires.
viernes, 21 de septiembre de 2018 · 07:00

Un rancho de adobe donde nació el dirigente político más influyente del siglo XX en la Argentina, un circuito de "pulperías" (almacenes de campo) y la intimidad rural de sus viejos caminos de tierra dibujan el encanto de Roque Pérez, un pueblo a solo 130 kilómetros de Buenos Aires, pero que se diría ubicado a años luz de la prisa en la gran ciudad.

Hasta aquí llegan quienes buscan explorar una porción de la historia argentina pero también experimentar el sabor de antaño en la pampa, aquella extensión infinita hecha de atardeceres sin tiempo y leyendas de gauchos y cuchilleros.

A pesar de su discreción campera, Roque Pérez se ganó un lugar en los libros de historia porque se afirma que aquí nació el tres veces presidente argentino Juan Domingo Perón: y no sin polémica, ya que los registros oficiales atribuyen su nacimiento a la vecina ciudad de Lobos (que cuenta con museo y todo para su presunto hijo más famoso).

Sin embargo -explica Verónica Reina, guía del rancho de adobe de Roque Pérez que se considera como la auténtica casa natal del político, "Juan Domingo es de acá, de Roque Pérez. La casa habla por sí misma: es de mayo de 1893, y en ese mismo año el 7 de octubre nació Perón".

"Fue anotado dos años y un día después en Lobos -precisa- porque en Roque Pérez no teníamos Registro Civil. La familia vivió acá hasta 1904, y las propiedades estaban todos a nombre de Juana Sosa, la madre de Perón. En 1938 -cuando muere su primera señora- Juan Domingo viene acá a Roque Pérez y se hizo cargo de de la deuda que tenía ese terreno".

A su médico, Perón le dio a entender -agrega Verónica- que "no había nacido en Lobos sino en un pueblo a orillas del río Salado. El médico buscó registros y personas que corroboraron su relato: y de hecho Perón nunca dijo que había nacido en Lobos, siempre dijo había nacido cerca del río Salado".

Pero en Roque Pérez -apunta Martín Parzianello, coordinador de Turismo- "no tenemos solo lo que llamamos 'el Perón pobre'.

Hasta aquí se viene también para descubrir nuestros almacenes de campo, nuestras 'pulperías', los shopping del 1900".

"Están recuperados para la cultura popular y para que los visitantes se encuentren con algo que pasó acá toda la vida, que es visitar un viejo boliche, un viejo almacén de campo con sus paisanos ahí adentro", agrega.

Un extenso circuito de "pulperías", inédito en otros lugares y debido probablemente a la instalación en la región de familias italianas que dividieron en parcelas más chicas lo que solían ser enormes estancias de miles de hectáreas, con la consecuente necesidad de aprovisionamiento, hace de Roque Pérez y sus parajes un lugar inédito.

Entre ellas se encuentra el almacén de ramos generales La Paz, de 1859, un icono de la región que fue centro de abastecimiento y tiene detrás una "pulpería" de adobe cuya habilitación lleva la firma del caudillo bonaerense del siglo XIX Juan Manuel de Rosas.

También el almacén La Paz Chica, intacto desde los más recientes años 60, y el almacén San Francisco, construido en adobe en 1934, y donde hoy se puede probar una exquisita cocina de campo donde la raíz criolla se confunde con el aporte italiano en quesos y embutidos.

En el paraje Forastieri se encuentran el almacén La Querencia, El Descanso y El Gramiyal: en este último Susana y Tito, los cálidos anfitriones con acento de campo, sirven cervezas a los parroquianos que juegan al truco, el más típico juego de naipes argentino, como si en sus mesas el tiempo nunca pasara.

"La gala de las 'pulperías' -concluye Parzianello- es el primer sábado de cada enero, cuando se organiza la Noche de los Almacenes y todos los locales se visten de gala, con peñas y comidas tradicionales, entre shows musicales que van del folklore a la cumbia".

Pero a lo largo de todo el año, el pueblo multiplica sus propuestas en los encuentros organizados en el viejo Cine Teatro Colón, en sus circuitos de mountain-bike y en los parajes aún más campo adentro, como Beguerie, que son motivo de otros viajes y otras historias.

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