Mano militar de Bolsonaro con el fuego del Amazonas

SAN PABLO- Unos 44.000 soldados de Brasil comenzaron a ser desplegados hoy por el gobierno de Jair Bolsonaro para controlar los incendios en el Amazonas, mientras el G7 endurecía posiciones y ponía a riesgo la aplicación del tratado comercial UE-Mercosur por los descuidos en esa región.

Los miembros del Ejército estaban siendo desplazados en aviones militares, anunciaron los ministros de Defensa, Fernanzo Azevedo, y de Ambiente, Rocardo Salles.

Ambos funcionarios les solicitaron ayuda hoy a los estados para combatir la quema que destruye la selva amazónica y ha tenido un efecto a escala global, con muchos países objetando a Bolsonaro.

La reunión de los dos ministros fue una de las respuestas de Brasil a las críticas internacionales sobre la acción en medio del incendio forestal y ciertas responsabilidades por la quema deliberada de bosques para lograr más espacios cultivables.

Después de la reunión ministerial, Salles habló con la prensa. Durante su presentación señaló que, con la firma del (decreto de urgencia) GLO y la participación de las Fuerzas Armadas, la situación tiende a mejorar.

"Les hemos estado pidiendo a los estados, desde principios de año, que nos apoyen en la supervisión y el control de los incendios. Las medidas de control no pueden desarrollarse sin el apoyo del estado", dijo el ministro.

Salles también señaló que la participación del Ministerio de Defensa para la lucha contra incendios ayudará a controlar la situación.

Empero surgieron voces críticas a la acción y algunos medios de prensa señalaron que "los soldados son soldados y no bomberos", y que no están preparados para combatir incendios.

El titular de Ambiente también admitió que el crimen ambiental en Brasil ha estado creciendo durante los últimos siete años y desmintió las denuncias sobre una suspensión de fondos dedicados a la preservación del Amazonas.

"No hubo cancelación (de esos subsidios estatales). Lo que sucedió es una suspensión de la transferencia, ya que las reglas del fondo se están revisando. Recuerden que hay un saldo de mil millones, que se seguirá utilizando", les dijo a los periodistas.

Anoche, Bolsonaro -un exmiembro del ejército como varios de sus ministros- anunció el despliegue de tropas federales con el equipamiento apropiado para combatir las llamas en la selva amazónica.

También culpó al clima más seco de lo normal del aumento de los focos de incendios durante este año.

En un discurso por televisión para todo el país, Bolsonaro dijo que su gobierno es muy consciente de la situación y que luchará contra el "crimen ambiental" de la misma manera que combate los delitos comunes.

También aseguró que la difusión de "información falsa" sobre la situación en el norte de Brasil "no ayuda a resolver" el problema.

Tras haber calificado los incendios de naturales en un primer momento y acusar sin pruebas después a las ONG de provocarlos, Bolsonaro adoptó un tono más serio a primera hora de ayer, anunciando la convocatoria de los principales miembros de su gabinete para elaborar una respuesta.

"Que no se equivoquen los incautos que insisten en salvaguardar los propósitos del Amazonas brasileño: los soldados estarán siempre alerta y vigilantes, listos para defender y repeler cualquier tipo de amenaza", afirmó Edson Leal Pujol, jefe de las Fuerzas Armadas.

También dijo que sus soldados están preparados para defender el Amazonas, pero no pareció referirse a los fuegos.

Aunque los incendios ocurren en forma habitual y natural durante la estación seca en esta parte del año, los ambientalistas culpan del abrupto aumento a los agricultores que prenden fuego la selva para despejar tierras para siembras.

El presidente Bolsonaro dijo en repetidas ocasiones que el país debería abrir el Amazonas a los intereses empresariales permitiendo que las compañías mineras, agrícolas y madereras exploten sus recursos naturales. (ANSA)