Torturas en Malvinas, 18 militares acusados

La justicia argentina divulgó los nombres de los 18 militares acusados de torturar a soldados conscriptos durante la guerra de Malvinas de 1982, en uno de los capítulos más oscuros de la historia del país en plena dictadura (1976-1983).

Se trata de 18 oficiales y suboficiales que serán indagados en la provincia de Tierra del Fuego, en el extremo sur del país y que tiene jurisdicción en el territorio malvinense a pesar de estar bajo la soberanía británica.

El juez Federal de Ushuaia, Federico Calvete, citó a los 18 miembros de las Fuerzas Armadas en función de "cuantiosos elementos probatorios" que "permiten sospechar la comisión de delitos", según la resolución judicial citada por la agencia oficial Telam.

Los acusados son Miguel Ángel Garde, Belisario Gustavo Affranchino Rumi, Eduardo Luis Gassino, Jorge Oscar Ferrante, Emilio José Samyn Duco, Jorge Guillermo Díaz, Luis Alfredo Manzur, Raúl Antonio Linares, Pablo Emilio Hernández, Claudio Tamareu, Jorge Arnaldo Romano, Ramón Eduardo Caro, Sergio Alberto Guevara, Oscar Luis Contreras, Francisco Gabriel Rivero, Oscar Albarracín, Ramón Desiderio Leiva y Gustavo Adolfo Calderini.

La causa se inició por las denuncias de varios soldados que combatieron cuando tenían entre 18 o 19 años, sin preparación ni equipamientos bélicos adecuados, en la guerra de Malvinas contra el Reino Unido que culminó con la derrota militar argentina. Las primeras 25 denuncias fueron radicadas en la justicia en 2007 por el entonces secretario de Derechos Humanos de la provincia de Corrientes (fronteriza con Brasil), Pablo Vassel, a raíz del impulso del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas de la ciudad de La Plata (CECIM), 60 km al sur de Buenos Aires.

Según Telam, el fiscal federal de la ciudad fueguina de Río Grande, Marcelo Rapoport, con la asistencia de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad, solicitó en mayo de este año la "detención e indagatoria" de 26 militares.

Finalmente el juez Calvete, quien actúa como juez subrogante de la causa, hizo lugar a 18 casos y dispuso notificar a cada uno de los imputados.

Se desconoce la fecha en que deberán presentarse a declarar en los tribunales de Tierra del Fuego. Pero la causa debe aún establecer si los crímenes que se les atribuyen a los 18 militares se encuadran en "delitos de lesa humanidad" y por ello serían imprescriptibles.

El juzgado de primera instancia y la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia, en la Patagonia, sur del país, consideraron que sí se trata de "crímenes de lesa humanidad".

Sin embargo, recordó la agencia, resta por resolver un recurso de queja presentado ante la Cámara Federal de Casación Penal.

La acusación del fiscal Rapoport afirma que en la Isla Gran Malvina, una de las dos del archipiélago, se registraron 22 vejámenes contra soldados, "específicamente en el ámbito de la Fuerza de Tareas Yapeyú, donde se desempeñó el Regimiento de Infantería N°5 -dependiente de la III Brigada de Infantería-, al que estaban subordinadas cinco compañías militares".

Según la denuncia, los jefes militares "habrían ordenado y ejecutado contra soldados conscriptos diversos actos de tortura -entre ellos, los conocidos estaqueamientos y enterramientos- como forma de controlar las alegadas indisciplinas que generaban las penurias que padecía la tropa a causa, fundamentalmente, de la falta de abrigo y comida".

Tras la guerra de Malvinas se conocieron decenas de denuncias de estos jóvenes soldados que se quejaron no solo de la falta de comida, equipos militares o ropa adecuada, sino además por la tortura a la que fueron sometidos por sus superiores.

En concreto varios soldados denunciaron que fueron clavados con estacas en el suelo por varias horas soportando temperaturas bajo cero al estilo de una "crucifixión" con todos sus miembros atados con sogas. También eran enterrados como castigo al robo de comida al que debían recurrir para no morir de hambre, según las denuncias.

El centro de excombatientes sostiene que en total hay 105 casos denunciados y 95 militares involucrados.

Gran Bretaña invadió las Islas Malvinas en 1833 expulsando al gobernador y a la escasa población argentina del archipiélago.

En 1982 la dictadura militar, la mas sanguinaria de la historia latinoamericana, recuperó por la fuerza las islas, lo que dio lugar a una guerra que se saldó con la victoria británica sobre las fuerzas argentinas.