Algunas de las estrategias que desnudará el debate presidencial
Los seis aspirantes mostrarán hoy sus propuestas acerca de cuatro ejes temáticos: seguridad; empleo, producción e infraestructura; federalismo, calidad institucional y rol del Estado, y desarrollo social, ambiente y vivienda.
Durante esta jornada pudieron ser conocidas algunas de las estrategias que los candidatos a presidente desplegarán hoy desde las 21 en el segundo debate obligatorio en vista de las elecciones generales del próximo domingo en nuestro país, en las que participarán Mauricio Macri (Juntos por el Cambio), Alberto Fernández (Frente de Todos), Roberto Lavagna (Consenso Federal), Nicolás del Caño (Frente de Izquierda y de los Trabajadores-Unidad), Juan José Goméz Centurión (Frente Nos) y José Luis Espert (Unite por la Libertad y la Dignidad).
El encuentro será en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, después del primero que fue hace una semana en la Universidad del Litoral, en la Ciudad de Santa Fe, con el requisito de que no podrán tener apuntes en los atriles, sino solo hojas en blanco y bolígrafos.
En esa oportunidad mostrarán sus propuestas en relación con cuatro ejes temáticos: seguridad; empleo, producción e infraestructura; federalismo, calidad institucional y rol del Estado, y desarrollo social, ambiente y vivienda.
En la previa, Fernández -quien no realiza coaching para estas instancias- dejó entrever que se prepara para poder completar todas sus ideas antes de que suene la campana que indica el final de cada exposición.
Y que además sería menos confrontativo para mostrarse esperanzado de cara al futuro, aunque insistirá en remarcar las diferencias que tiene con Macri.
Por parte del Presidente, las previsiones apuntan a que volverá a confrontar directamente con Fernández -como ya lo hicieron en el primer debate- pero con un aspecto a tener muy en cuenta: como uno de los temas será federalismo, calidad institucional y rol del Estado, el mandatario nacional podría mencionara los presuntos hechos de corrupción durante el gobierno kirchnerista, como ya ha hecho en otras oportunidades.
A la vez, Lavagna -en cierto punto, el tercero en discordia tras las PASO de agosto- continuaría con su postura de mostrarle propuestas al electorado sin chicanear a sus adversarios, siempre escudado en la idea de que él sabe cómo resolver los problemas del país porque ya lo hizo en el 2003, discurso que mantuvo a lo largo de toda su campaña.
