Los libertarios avanzan y Mendoza toma nota

El resultado de las legislativas en la Ciudad de Buenos Aires reordenó el mapa político y abrió nuevos interrogantes para el futuro inmediato.
domingo, 18 de mayo de 2025 · 21:14

La jornada electoral de este domingo en la Ciudad de Buenos Aires dejó un resultado que, más allá de los números, marca un punto de inflexión en la política argentina. Por primera vez en casi dos décadas, el PRO fue desplazado de su histórica centralidad porteña. La elección legislativa se convirtió en un mensaje claro: el ciclo iniciado en 2007 por Mauricio Macri en CABA parece haber llegado a su fin, y La Libertad Avanza se posiciona como el nuevo actor fuerte.

Leer también: Tras gobernar 18 años la Ciudad, el PRO quedó tercero y ganó La Libertad Avanza

Manuel Adorni -candidato libertario y actual vocero presidencial- se ubicó en primer lugar con el 30,14% de los votos, seguido por Leandro Santoro, del peronismo porteño, con el 27,34%. Más atrás, quedó Silvia Lospennato, del PRO, con el 15,93%. El resultado no solo rompe una hegemonía que parecía consolidada, sino que también empieza a reordenar el panorama político pensando en lo que puede pasar a nivel nacional.

El PRO perdió todas las comunas que había ganado en 2023.

Lo que pasó en la Ciudad muestra que el electorado está buscando nuevas formas de representación. En muchos casos, prefiere a candidatos disruptivos o ajenos a los partidos de siempre, incluso cuando eso implique asumir ciertos riesgos. Detrás de todo esto, sigue habiendo una idea simple: el deseo de que la política dé respuestas concretas y efectivas. Y en un contexto marcado por la inflación, el malestar económico y la distancia entre dirigentes y ciudadanos, el voto también se convierte en una manera de expresar ese cansancio.

Mendoza, entre el cálculo y la oportunidad

En ese nuevo mapa, Mendoza aparece como una de las provincias más importantes. No solo por peso electoral, sino por el rol que ocupa en la política nacional. Con una identidad radical consolidada y una administración que supo construir respaldo social y territorial, el oficialismo mendocino enfrenta hoy un escenario distinto al que conocía.

Alfredo Cornejo y Javier Milei. 

El resultado que dejó las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires, sumado al avance nacional del oficialismo libertario, reabre un debate: ¿seguir construyendo con los socios actuales o empezar a mirar de cerca algún tipo de acercamiento con La Libertad Avanza? Hasta ahora, la relación ha sido institucional, con algunos puntos de coincidencia en el Congreso, contactos puntuales y colaboración legislativa. Pero sin un alineamiento político formal.

La autonomía de gestión es un valor importante para Mendoza, sobre todo cuando se trata de defender los recursos propios. Sin embargo, también lo es tener incidencia en la agenda nacional. Y si el escenario político se sigue inclinando hacia el espacio libertario, la provincia -y su conducción política- tendrá que evaluar cómo reposicionarse sin perder capital ni influencia.

Una etapa nueva, con otras reglas

Lo visto en los comicios de CABA refleja algo más profundo: la política ya no se juega únicamente en los partidos clásicos, ni en las estructuras territoriales de siempre. Hoy también se define en la forma de comunicar, en la percepción pública y en la capacidad de construir una conexión real con la gente. Eso no significa que lo anterior haya quedado obsoleto, pero sí que ya no alcanza con repetir fórmulas conocidas.

Mendoza observa de cerca el nuevo escenario nacional y evalúa sus próximos pasos políticos.

Lo que pasó este domingo no define todavía el panorama de 2025, pero sí deja en claro que las reglas del juego están cambiando. Las próximas elecciones nacionales van a depender, en gran parte, de quién sepa interpretar mejor esta nueva etapa. Quien sepa construir propuestas que conecten con la sociedad, sin subestimar el malestar, pero tampoco cayendo en respuestas vacías.

Mendoza tiene tradición institucional y política para sostener su protagonismo, pero también está frente a una oportunidad: leer el momento político con precisión, adaptarse si es necesario y elegir, con inteligencia, si conviene alinearse o diferenciarse.

Otras Noticias