Matate primero

viernes, 26 de abril de 2019 · 07:00

Por Guillermo Giaquinta

Publicista

Especial para MendoVoz

 

Hasta los ’90, los diarios de papel eran la primera forma de acceder a la realidad cotidiana. A partir de las 2 o 3 de la mañana, ya tenías al canillita en la esquina. Con más o menos impacto (esto siempre fue Argentina) las portadas daban una nota política nacional, una provincial, algo de deporte, alguna catástrofe natural mundial y nada de eso lograba amargarte el día con un golpe de vista.

Ya tenías elementos suficientes para “las charla de ascensor”.

Los policiales, aparecían en las últimas hojas. Si querías leerlos, los leías. Si no, no.

Hoy, los medios son muchos más y más inmediatos y el protagonismo lo tienen las policiales. Son tiempos violentos. En estos días, no podés evitar conmocionarte por la cantidad de crímenes y en particular por los de violencia de género.

Los más impactantes: los que involucran niños.

Los que se repiten: femicidio seguido de suicidio.

El nivel de locura del tipo que mata a su mujer y, peor, a sus hijos, lo podrá categorizar un psiquiatra.

“Se me salió la cadena. Me mandé una cagada” dijo un loco de estos en un mensaje de whatsapp a un amigo, antes de suicidarse.

Comenté entre amigos que yo haría una campaña con el lema Matate primero.

 

Off locutor:

Si tenés pensado matar a tu mujer y después suicidarte…

¡Matate primero!

Si sos tan macho,

¡Matate primero!

Y no dejés a tus chicos guachos

Ante cualquier duda, andá a la guardia del Pereyra.

 

Obviamente, no me tomaron en serio.

Lograríamos un suicidio, les dije. Ok. Eso no está nada bien.

Mejor sería que recibiera ayuda a tiempo para no matar ni matarse.

Pero se evitarían muertes absurdas en temas que no se deberían resolver a vida o muerte.

La campaña Matate primero fue una ocurrencia. Una tontería, una forma poco seria de soportar un tema tan serio.

Además, son muchos estos casos en Mendoza pero, afortunadamente, no se le ocurre hacerlo a toda la población, como para necesitar de una campaña masiva.

¿Qué campaña estará faltando, entonces, para evitar este romeojulietismo imbécil?

 

13

Otras Noticias