Panorama vitivinícola: Del debate depende la sostenibilidad de la industria

viernes, 13 de marzo de 2020 · 00:01

Por Marcelo López especial para MendoVoz

Las actividades vendimiales tensaron la cuerda al máximo en la interna institucional. Las cartas ya están puestas sobre la mesa. Las entidades que bancan a la COVIAR ven como un éxito el desayuno y el rango institucional que ha tenido.

Con algo de picardía remarcan que fue el ámbito en donde todos pudieron expresarse y en el cual el gobernador de Mendoza realizó los anuncios más importantes para el sector, los cuales serán el eje de discusión de los próximos meses, junto con los reclamos y las experiencias de los productores que vienen participando activamente junto a sus organizaciones en la discusión del nuevo PEVI.

El agasajo de Bodegas de Argentina, por otro lado, se ha transformado más en un buen espacio de intercambio social y de contactos que de discusión de la vitivinicultura.

Sin embargo, ambos eventos siguen siendo los principales en materia económica y política del clásico sábado vendimial.

Mientras la cosecha parece encaminarse a un nivel definitivo que arañará apenas los 20 millones de quintales, las maniobras especulativas están al orden del día, mientras que no hay forma de que repunten los precios de la uva y el vino.

Los desafíos más extremos para el futuro fueron lanzados por el Gobierno de Mendoza. Rodolfo Suarez no tuvo empachos en plantear públicamente una discusión que hasta entonces se ocultaba en los sótanos: la regulación de la plantación de viñedos.

Por ahora, los únicos que fijaron posición oficial sobre el tema fueron los integrantes de la Acovi, que a través de un escrito de su gerente, Nicolás Vicchi, aseguró: "La regulación de plantaciones junto con la exigencia de requisitos sustentables para nuevos viñedos planteada por el Gobierno provincial debe ser estudiada, ya que dentro de sus objetivos debe existir el fin de reordenar las plantaciones frente a la crisis hídrica, generar políticas para reactivar fincas abandonadas potenciando el desarrollo local y el arraigo, junto con la generación de oportunidades para la incorporación de jóvenes en la actividad; acompañado de políticas de incentivo y financiamiento acorde a la realidad económica y envergadura de la inversión".

La entidad que agrupa a las cooperativas vitivinícolas asegura que "la grave escasez del recurso hídrico exige la urgente aplicación de políticas de gestión eficiente y de aplicación expedita, como son infraestructura de gran magnitud y obras complementarias, la elaboración de los balances hídricos, rever el otorgamiento de permisos precarios y temporarios, alquiler de perforaciones privadas y desarrollo de nuevas perforaciones públicas que estén cercanas a los cauces para reforzar su dotación, permitir que las inspecciones de cauce sean sujetos de crédito para el FTC, entre otras. Además es urgente contar con los fondos nacionales y provinciales para hacer frente a la campaña de lucha contra la Lobesia botrana".

Los planteos del Gobierno mendocino de regular la implantación y la formación del banco de vino serán -sin dudas- los ejes más importantes de la discusión que viene y profundizarán las posiciones de un lado y otro del mostrador vitivinícola. En un par de semanas terminará la vendimia, los productores recibirán -una vez más- precios que los dejarán al borde la bancarrota y solo servirán para preanunciar una nueva baja de la cosecha para el año próximo que no alcanzará tampoco para levantar el valor, porque la concentración del sector sigue creciendo día a día.

El debate se abrió y de su resultado depende definitivamente la sostenibilidad de la industria vitivinícola.