Panorama Vitivinícola: Un comienzo a puras noticias

viernes, 8 de enero de 2021 · 07:39

Por Marcelo López, especial para MendoVoz

En el reinicio del reencuentro semanal con la actividad, el análisis y la opinión de lo que pasa en el mundo vitivinícola, la bolsa viene llena de novedades que se acumularon en las dos semanas cortas que marcaron las navidades y el fin de año.

En orden cronológico, la primera fue una buena noticia, la publicación en el Boletín Oficial del Plan Estratégico Vitivinícola (PEVI) 2030 no solo marca el comienzo de una nueva etapa en el desarrollo de la vitivinicultura con participación de todos los actores, sino que también termina con una discusión institucional entre quienes apostaban al PEVI y quienes estaban decididos a enterrarlo.

La decisión del Estado de darle vida al PEVI 2030 también salda la discusión acerca de la institucionalidad y continuidad de la COVIAR que, como ya se sabe, era fuertemente cuestionada por una parte del directorio de Bodegas de Argentina.

Ahora el desafío del sector pasa por integrar a los díscolos y volver a mostrar una vitivinicultura unida detrás de los objetivos comunes de desarrollo tecnológico, crecimiento de mercados y sustentabilidad del sector. Sin embargo, el camino no será sencillo; está a la vista que las diferencias que se muestran con los acontecimientos de superficie son algo más profundas y tienen que ver con visiones que difieren fuertemente sobre cuál debe ser el futuro de la industria vitivinícola y toda su cadena de producción. Algo que ya hemos contado más de una vez.

Con el correr de los meses y años se verá si se puede concretar uno de los principales objetivos del PEVI que es el desarrollo equilibrado entre todos los sectores, algo que claramente no se ha dado en la nueva vitivinicultura. Las diferencias entre los diversos escalones de la cadena y cómo les fue en los últimos años es notable y visible y de ello también hemos hablado más de una vez en esta columna.

El último día del 2020, el Gobierno nacional publicó en el Boletín Oficial una medida largamente reclamada; la baja a cero de las retenciones para los productos agropecuarios de las economías regionales, en Mendoza es muy buena noticia para el aceite de oliva, ciruelas, duraznos y varias producciones más. Sin embargo, el mismo decreto contenía la normalización de las retenciones a las exportaciones vitivinícolas fijándolas en 4.5 puntos. Hasta ese día, las retenciones eran de $3 fijos por dólar exportado, que en el momento que las instauró el gobierno de Mauricio Macri eran justamente un 4.5% aproximadamente.

La medida, que en la práctica significa aproximadamente el aumento de un punto en el derecho de exportación, no fue -sin embargo- criticada públicamente por los dirigentes del sector; es más, el propio vicepresidente de Bodegas de Argentina admitió públicamente al Diario La Nación que “en términos absolutos, tenemos dos puntos y medio a favor contra 12 meses atrás. Esta es una medida que no es positiva para nosotros en cuanto a aliento de las exportaciones, pero tenemos que reconocer que hace dos meses nos subieron los reintegros, lo que implica un impacto anualizado de US$30 millones”.

La explicación de porqué el bajo nivel de crítica es que la industria ya había sido advertida extraoficialmente por el Gobierno cuando se anunció la duplicación de los reintegros por exportaciones de que se actualizarían las retenciones a un valor similar al que tenían cuando se colocaron.

Pero además continúan las negociaciones desde la COVIAR del programa que se le presentó en su momento al Ejecutivo nacional para la ampliación de exportaciones que contemplaba el aumento de los reintegros -ya acordado- y una tabla de retenciones decrecientes según el tiempo que se demorara la liquidación de las divisas de la exportación con un máximo de 180 días.

Por eso hay un prudente silencio, mientras las negociaciones continúan y pronto podrían llegar novedades que serían importantes para la industria.