Panorama Vitivinícola: Un resumen post cosecha

Por Marcelo López, especial para MendoVoz

Mayo avanza rápidamente y se acerca la liberación de los nuevos vinos en un panorama que ya venimos describiendo en las últimas semanas es inestable y que algunos preanuncian complicado.

La cosecha cerró dentro de lo que previó el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) en Mendoza, pero bastante más baja en San Juan, según anticipa el titular del INV, Martín Hinojosa, en diálogo para este espacio.

Tal como anticipamos anteriormente, el titular del Instituto coincide en que con la liberación de los vinos habrá un stock equilibrado que de mantenerse el consumo del año pasado o incrementarse un poco no deberían existir problemas.

Sin embargo, la mayoría de las fuentes consultadas para este espacio coinciden con lo expresado por Hinojosa, pero aseguran que hay un clima extraño, los números dicen que el vino está, pero todo dicen que no hay, lo cual crea un clima bastante extraño y de tensión entre los distintos actores.

Seguramente, después del primero de junio se podrá tener un panorama más certero de cómo se transitará el resto del año.

Mientras se esperan los números de abril del mercado interno, se conocieron los de las exportaciones del cuarto mes del año que no fueron buenos; cayeron más de 16 puntos (16.7) en fraccionados un 0.6 y en los graneles por encima del 37 %. El titular del INV prefiere ser prudente y esperar que se cierren los primeros seis meses del año para los segmentos interno y externo para poder trazar algún análisis de lo que puede pasar en el resto del año.

Hinojosa prefiere centrar esfuerzos en el avance del Proviar que asegura que viene muy avanzado en el trabajo y destaca que hay mucha voluntad del organismo crediticio de comenzar con el programa, en tanto que las instituciones locales (COVIAR e INV) vienen avanzando fuertemente con el diseño de los programas y completando los requisitos.

Mientras tanto, en el ámbito de la industria, se acumula ruido por una especie de revolución en el mercado de pases de actores fundamentales, como por ejemplo los enólogos.

Al respecto hay varias versiones pero no son pocos los que afirman que cada vez hay más tensiones entre los titulares o ceos de las bodegas y los enólogos por los tipos de vinos que se producen y lo que hoy reclaman los mercados, sobre todo los masivos. Hay quienes sostienen que los productos que se propone elaborar por parte de los profesionales son para consumidores muy exclusivos por sobre los más extendidos o populares y esto crea muchas rispideces. 

Algunos de los comunicados que se emitieron en las últimas horas para confirmar algunos retiros parecen darle la razón a quienes sostienen esto. Claro que hay que aclarar que las generalizaciones siempre son injustas.

Sin embargo da la sensación de que cada vez aparecen más ruidos en una industria que además parece encaminarse a producciones cada vez menores por varias razones, algunas que ya hemos descrito en estos espacios más de una vez que pasan por la erradicación de viñedos o en otros casos reemplazo de variedades por otras de menor producción pero mayos especificidad.

Así las cosas, parece que al igual que todas las actividades en la Argentina, lo que resta del año será bien movido para la vitivinicultura argentina.