Comerciantes mendocinos alertan sobre nuevas estafas virtuales
Se trata de los engaños en transacciones de pago virtual. El detalle del modus operandi.
Comerciantes mendocinos denunciaron una nueva modalidad de estafa de la cual han sido víctimas en el último tiempo y quieren alertar a la sociedad. Se trata de los engaños en transacciones de pago virtual.
"Resulta contradictorio impulsar por un lado el comercio electrónico y por otro encontrarnos los comercios con esta desprotección a la hora de vender en la virtualidad. A cualquier comercio, una situación como la que estamos denunciando públicamente le afecta gravemente, más allá del monto", explicaron los denunciantes del rubro de la construcción.
El problema surge cuando el comercio entrega la mercadería luego de recibir la aprobación de la transacción por parte del procesador de pagos, aunque esta compra ya haya sido desconocida por parte del verdadero titular de la tarjeta.
El modus operandi
La estafa comienza con el robo de datos personales para utilizarlos en una compra electrónica. Los operadores de pagos como Prisma y/o Fiserv autorizan la operación de compra del (falso) cliente y por ende la transacción para que el comercio entregue la mercadería. Luego, a la hora del desconocimiento de la compra por parte del verdadero titular de la tarjeta, evaden su responsabilidad.
El titular de la tarjeta realiza el desconocimiento de la operación y el procesador de pagos le reintegra inmediatamente el importe en su resumen y le realiza un contracargo al comercio.
Y el banco se deslinda automáticamente de su responsabilidad aduciendo que es un simple intermediario entre el comercio y el procesador de pagos.
Es decir que, es el comercio el único que se perjudica. "Es el actor más vulnerable de toda la cadena. Entrega la mercadería de buena fe luego de recibir la aprobación de la transacción por parte del procesador de pagos", indicaron.
Los empresarios ya han realizado los correspondientes reclamos a Prisma y bancos y no han obtenido respuesta ni solución alguna. "Sabemos que hay muchos más casos como el nuestro, y que los delincuentes actúan con total impunidad al igual que los procesadores de pagos como Prisma y Fiserv", denunciaron.
El comercio electrónico está en riesgo hasta tanto los procesadores de pagos se hagan responsables por las transacciones que autorizan.
Los perjuicios
Otro dato a tener en cuenta son los tiempos de las gestiones. El titular de la tarjeta tiene hasta 30 días luego de la recepción de su resumen de tarjeta para desconocer una compra. "Esto nos ubica como comercio en una situación de vulnerabilidad durante aproximadamente 60 días en caso que la transacción se realice al día siguiente al cierre de resumen de tarjeta.
"Ni hablar del desgaste administrativo y de tiempos del comercio para realizar los reclamos infructíferos al procesador de pagos luego de encontrarse con un contracargo en su cuenta bancaria, donde previamente se había acreditado la operación, por el importe total de una transacción realizada hasta 60 días atrás, la cual se había realizado con botón de pago de Prisma, y fue debidamente autorizada por el medio de pago correspondiente antes de la entrega de la mercadería", remarcaron los comerciantes.
"Esta situación demuestra la desprotección que tenemos los comercios al operar con tarjetas de crédito, especialmente en las ventas online o no presenciales", sentenciaron.
Las entidades que los representan ya están al tanto de los problemas con las ventas electrónicas, estas son la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), la Asociación de Ejecutivos de Mendoza (AEM), la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) y la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE).
