El complejo penitenciario Almafuerte II está listo para recibir reclusos
El nuevo establecimiento carcelario permitirá fundamentalmente disminuir la sobrepoblación y ejercer un mayor control de la seguridad.Luego de la visita del gobernador Rodolfo Suarez, junto con autoridades del Gobierno provincial y de la Justicia de Mendoza, el Servicio Penitenciario comenzará con el proceso destinado a la puesta en funcionamiento de uno de los complejos carcelarios más grandes y modernos de Latinoamérica. Se trata de Almafuerte II.
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Desde el Gobierno provincial indicaron que de esta manera, no solo se ampliará la cantidad de plazas sino también se mejorarán las condiciones de alojamiento, alcanzando un mayor grado de seguridad debido a la incorporación de tecnología de última generación, y a la infraestructura con la que cuenta el lugar. El ingreso y traslado de los primeros internos comenzará a concretarse aproximadamente 30 días después de la primera inauguración, y de la comprobación de todos los protocolos y sistemas de seguridad.

Infraestructura y tecnología
Almafuerte II posee un sistema de seguridad inteligente que incluye 192 cámaras, sensores perimetrales externos, escáner tipo aeropuerto, sistema de identificación biométrica, data center, centro de monitoreo, videowall, y un centro de grabación y almacenamiento de filmación. Además, controles electromecánicos a distancia e inhibidores de señal de telefonía por zona.

En cuanto a su funcionamiento, el complejo cuenta con una superficie cubierta total de 38.400m2, distribuidas en tres cárceles independientes. La primera, compuesta actualmente por la Unidad Nº 11 Centro de Alojamiento Permanente, para adultos mayores de 55 años, y la Unidad Penal de Mujeres, antiguamente ubicada en El Borbollón.

La segunda, que estará destinada al sector de máxima seguridad, compuesta por cuatro sectores de dos alas cada uno. Este espacio se diferenciará de los demás, particularmente porque allí, cada ala estará compuesta por 12 celdas unicelulares, es decir para una persona privada de libertad, teniendo así un cupo total de 96 plazas.
Y una tercera, compuesta por dos unidades, ubicadas en espejo a la primera cárcel. Es decir, serán dos unidades más, con cuatro alas de 16 celdas cada una.

En total, este establecimiento tendrá una capacidad de 980 camas aproximadamente y contará con espacios comunes únicamente para los juzgados de ejecución, el centro universitario para quienes cursen sus estudios superiores, la cocina, y otras áreas de trabajo en donde funcionarán talleres específicos.
Disminución de la sobrepoblación
El Servicio Penitenciario de Mendoza, con el acompañamiento de distintos entes que componen el Estado, se ha puesto al frente de esta temática para impulsar no solo el avance de obras de construcción y reacondicionamiento de complejos, unidades y alcaidías contravencionales sino también la modernización del concepto relacionado al tratamiento y la seguridad de las personas que se encuentren en contextos de encierro.

El proceso para descomprimir las cárceles y disminuir significativamente la sobrepoblación ha llevado a nuestra provincia a destacarse en materia carcelaria.
En 2015 el Servicio Penitenciario de Mendoza contaba con 3.862 personas alojadas en modalidad intramuros. Este número se incrementó en la actualidad y llega a 6.008. Esto determina, a diciembre de 2022, una tasa de encarcelamiento con un índice de 277,8 cada 100.000 habitantes, siendo el promedio de ese índice en Argentina de 211, y en Chile, de 223.

Mendoza se ha convertido en el quinto sistema penitenciario del país. Actualmente, tiene bajo su custodia seis mil personas alojadas intramuros en los 22 complejos, unidades y alcaidías con los que cuenta. No obstante, este crecimiento ha estado acompañado por una importante aceleración de los procesos. Actualmente, 74% de la población penal se encuentra penada y cumpliendo la sentencia, conforme a la pena recibida por el delito cometido.