La NBA está lejos del regreso
Uno de los torneos más poderosos del mundo sigue en espera por lo que vendrá."Si nos dicen que debemos volver a jugar dentro de dos semanas, la respuesta es no", afirmó Chris Paul, titular de la asociación de basquetbolistas sobre la reanudación de la temporada de la NBA.
Según el jugador de Oklahoma City Thunder la idea de un inminente regreso a las canchas está fuera de la realidad en un Estados Unidos que con más de 47.000 muertos y 856.000 infectados es el país más golpeado por el Covid-19. Así lo anunció la agencia Ansa Latina.
El lapso de 15 días es el que algunos consideran suficiente para realizar un período de entrenamientos antes de volver al ruedo, pero Paul, quien habló en nombre de sus colegas, no parece para nada convencido de ello.
"Esto no sucederá. No creo que la NBA lo esté considerando seriamente, pero si nos dijeran que tenemos dos semanas para entrenarnos y recomenzar, la respuesta será no", reiteró el base de los Thunder.
"Cualquiera sea el tiempo que requerirá ponerse en forma, seremos nosotros los que determinaremos cuándo volver porque somos nosotros los que jugamos y corremos el riesgo de lesionarnos si anticipamos ese regreso", explicó.
"Además, estamos en una situación en la que nadie sabe qué es lo que va a pasar. La única certeza es que queremos jugar, eso es seguro, pero todavía estamos intentando entender cómo y cuándo lo haremos", agregó.
"Es bueno que todos opinen y que tengan ganas de volver a vernos, pero la seguridad de los jugadores y de nuestras familias, así como la de los propios aficionados, está por encima de todo", completó Paul.
Entre los afectados de la NBA por el coronavirus está James Dolan, propietario de los New York Knicks, de 64 años y quien superó la enfermedad que contrajo hace casi un mes, aunque en su caso los síntomas no fueron tan graves.
A tal punto que transcurrió el período de cuarentena en su propia casa y tras recibir el alta médica concurrió a donar sangre para quienes se encuentran abocados a la búsqueda de una vacuna contra el Covid-19, que devastó a Nueva York.