Cultura mendocina: ¿y si nos damos una mano entre todos?
Se vienen tiempos duros y hay que actuar con celeridad. Acá, algunas propuestas.
El jueves pasado, con cierto grado de alegría, se recibió la noticia de que el Ministerio de Turismo y Cultura de la provincia va a ayudar a los hacedores culturales de dos maneras: una, por un crédito blando; y otra, por contratar servicios culturales para ser pasados en la plataforma MendozaEnCasa.com
La verdad es que la noticia llegó como una pequeña y buena solución para los problemas que están viviendo los artistas mendocinos, ya que de las dos maneras estarán recibiendo una ayuda económica que, hoy por hoy, es fundamental.
Desde el lado estatal, empiezan a cumplir. Ahora, desde el lado privado están atados.
Mendoza está entrando en una fase 4 de la pandemia y esto significa la reapertura -lenta- de muchas actividades. Bares, restaurantes y centros comerciales se están activando. Hasta las misas están por volver. Pero la cultura sigue parada.
En Alemania ya se han abierto teatros, limitados a un cincuenta por ciento de su capacidad y con estrictas medidas de seguridad. Esta semana se lo comenté a un productor local y su respuesta fue: “Hacer espectáculos así es inviable”.
Creo que es inviable si pensamos en artistas nacionales o internacionales pero para nada lo es si es con artistas de Mendoza. ¿Quién no tendrá ganas de subirse a un escenario a hacer lo que ama y cobrar por ello? ¿Acaso son las mismas cifras las que se manejan?
Este es el momento ideal para potenciar nuestros artistas. Hay que darle vuelo, marquesina y luces. Es el tiempo justo para dejar de pensar en los que vienen de afuera y apostar por los de acá.
Por eso, sería ideal que los productores locales se unan para hacer una movida local, dejen de lado mezquindades y que presenten un protocolo de acción lo más rápido posible.
Excepto dos departamentos, todos los demás tienen salas que dependen del Estado, además de los que son parte del Estado provincial. Ahí es donde hay que apuntar.
No es difícil: fila de butacas por medio y cada fila ocupada con una butaca vacía cada dos llenas; límite de técnicos y extremo control en los ingresos. Y funciones que, por ahora, no se extiendan por más de una hora.
Los espacios estatales tendrían que ser los que se deberían ocupar y muchos están listos para funcionar así como la sala 1 de la Nave Cultural, el teatro Independencia o el hall del Le Parc.
Los teatreros también deben empezar a pensar qué salas nos van a ofrecer a partir de ahora. Desde luego que hay que dejar de pensar en esos espacios chiquitos llenos de sillas apiladas y sin ninguna clase de protocolo de higiene y seguridad.
¡Vamos! Hay que ponerse las pilas…No estamos en una situación fácil y este el momento de darnos la mano entre todos para salir del pozo.
Esta semana se aprobó el protocolo que presentó el Clúster Film Andes para poder volver a filmar en Mendoza, sin actores y actrices. “Eso lo hablamos con la Asociación Argentina de Actores y tienen que presentar un protocolo. Hasta que no esté eso, no podrán volver a trabajar” dijo a quien firma Marcelo Ortega, presidente del ente.
El Estado ya dio un paso. Vamos por los otros que tenemos que dar nosotros, los que nos muevan y nos permitan volver pronto a los escenarios.
Los periodistas también queremos volver a llenar nuestros espacios de anuncios de obras y recitales y si son de artistas mendocinos, mucho mejor.
Walter Gazzo
