Vecino le entregó a Ambiente 37 tortugas terrestres
Son ejemplares que tenía en su casa, al heredarlos de un pariente. Los reptiles serán revisados y rehabilitados.Un vecino de Guaymallén entregó en forma voluntaria 37 tortugas terrestres que tenía en su casa, luego de heredarlas de un pariente.
El hombre hizo entrega de los ejemplares a la Dirección de Recursos Naturales de la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial. Este organismo, a través del Departamento de Fauna, se hizo cargo de estos especímenes, algunos adultos y otros juveniles de especie autóctona.
La entre fue de 37 tortugas de tierra argentina –denominadas Chelonoidis Chilensis-. Estos ejemplares tienen un caparazón cuyas dimensiones varían entre los 17 y 27 centímetros de largo, y los 12 y 15 de ancho.
El caparazón de la tortuga de tierra argentina es de color amarillo ocre, con el borde de las placas dorsales oscuro, aunque esto varía según la edad y el sexo.
Lo cierto es que estos reptiles fueron llevados al Centro de Rescate de la Fundación Cullunche, donde serán evaluados sobre su condición sanitaria y luego comenzarán una rehabilitación.
Desalentar su su tenencia, tráfico y comercialización
Aprovechando el caso, la Secretaría de Ambiente continúa trabajando para informar sobre la “necesidad” de desalentar la tenencia, tráfico y comercio ilegal de la fauna silvestre provincial.
El organismo recordó a través de un comunicado que la fauna silvestre de Mendoza está protegida por la Ley Nacional de Fauna 22421; la Ley Provincial de adhesión 4602, su modificatoria la Ley 7308 y el Decreto Reglamentario 1890/05.
Además, afirmaron que quienes quieran dar información sobre ejemplares heridos o denunciar casos de caza o tenencia ilegal pueden hacerlo a través del sitio web de Ambiente.
En tanto que también pueden comunicarse a la Dirección de Recursos Naturales Renovables a los teléfonos 4252090 y 4257065, de lunes a viernes de 8 a 13, o al 911.
Sanciones
La captura, tenencia ilegal y comercialización de fauna están penadas por la legislación, como también la destrucción de sus hábitats.
El presunto infractor será investigado por la Justicia y podrá ser reprimido con penas de cárcel. Además, las multas por este tipo de infracciones alcanzan valores de hasta $100 mil por ejemplar, según la gravedad del hecho, informaron desde la Secretaría de Ambiente.