Se instala el único “circo de la mujer”

​​​​​​​Circus Magenta es la compañía fundada por Virginia Bernad, que tomará tres espacios públicos lasherinos.
lunes, 8 de julio de 2019 · 07:00

El amor y dedicación al arte circense se lo debe a su padre, quien lejos de ser artista simplemente era un enamorado del género y la llevaba de niña a observar el armado y desarmado de las carpas, además de la función. Terminó el Secundario y partió a Chile para estudiar a la famosa escuela del Circo del Mundo durante tres años. Volvió a su Mendoza natal y, mientras se recibía de profesora de Teatro, Virginia Bernad no dudó un instante: fundó Circus Magenta.

Su compañía ha recorrido largas distancias en más de una década de carrera, pero recién este año Virginia logró el sueño de la “carpa propia”.

“En Mendoza y en Latinoamérica no hay carpas de circo de mujeres. Soy la única, te diría”, subraya con orgullo la directora de Circus Magenta, que se diferencia de otros circos al tener compañías invitadas para cada función.

Así será en el departamento de Las Heras para estas vacaciones de invierno. Del miércoles 10 al sábado 20, la carpa de Circus Magenta se instalará en el Parque de la Familia (Boulogne sur Mer y Almirante Brown, El Challao), con funciones diarias a las 16.30 y con entrada gratuita.

Y no será la única. Habrá otra carpa que rotará por dos espacios públicos: del miércoles 10 al domingo 14, todos los días a las 16.30, Circus Magenta abrirá su telón en la esquina de Dorrego y Olascoaga del barrio 26 de Enero, allí donde hasta hace poco tiempo era un basural. Luego, del martes 16 al sábado 20, el circo itinerante llegará al Cedrys N°5 del barrio Estación Espejo (Armada Argentina y Emilio Civit, El Resguardo). Todas las presentaciones serán gratis para el público.

Circus Magenta traerá al Parque de la Familia, por ejemplo, a una trapecista porteña, así como artistas locales de la talla del Circo de Getulio, Triglicircus, Las Locuras de Luduem y Circo Deluxe.

La propuesta de Bernad y su compañía se caracteriza por combinar las técnicas y variedades del circo tradicional con números del circo moderno. “Esto hace que seamos un circo más urbano, digamos”, explica Ludovica, tal su álter ego clown. Y destaca el rol central que la mujer ocupa en el espectáculo.

“A la mujer, como en otros ámbitos, le ha costado mucho ingresar al mundo del circo y conseguir un lugar propio porque el clown nace siendo netamente de hombres y el papel de la mujer fue entrando de a poco”, cuenta la artista que en su caso hace de Circus Magenta también una especie de reivindicación femenina. “El clown femenino de Circus Magenta es la directora de pista”, completa.

El circo es un arte popular y para toda la familia, que en el caso de Magenta combina el humor sano con acrobacias, malabares y otras disciplinas urbanas para cautivar a las nuevas generaciones con una propuesta original. De ahí que en sus presentaciones nos encontremos con música en vivo, con Djs, trapecios, telas, una esfera gigante y juegos interactivos, además del despliegue escenográfico y un colorido vestuario.

Cuando le consultamos por qué fundar su propio circo, Virginia Bernad se confiesa: “Porque era el sueño de mi papá”.

Ese impulso la llevó adonde hoy está, gracias a sus recuerdos de infancia junto a él, pasando tardes enteras entre aserrín y lonas, viendo a los acróbatas y clown preparando sus rutinas. Ahora es ella la dueña de su propia aventura circense.