Piden el traslado urgente de una chacarita que contamina en El Borbollón 

Los vecinos de las inmediaciones de la intersección de las calles Recuero y Paso Hondo, en El Borbollón, se reunieron para reclamar sobre una situación de larga data. En la zona se encuentra instalada una chacarita que se convirtió en un basural a cielo abierto y que está rodeada de viviendas, una escuela, la delegación municipal y un Centro Integrador Comunitario.

El lugar se ha convertido en un foco infeccioso, los moradores presentan problemas respiratorios, tiene inconvenientes con la presencia creciente de roedores e insectos y temen por la generación de un incendio que los involucre a todos.

“Queremos que hagan la limpieza urgente del predio, porque es impresionante la cantidad de basura que hay. Hemos actuado por las vías legales, presentando notas con la firma de 100 vecinos, pero no queremos tener conflictos solo pedimos que nos den una solución urgente”, remarcó Ayelén, una vecina del lugar.

Clausura, trabajo ilegal e infantil

Según sostienen los vecinos actualmente el lugar sigue operando como chacarita pese a la prohibición sanitaria de la Comuna. La puerta de ingreso se encuentra clausurada pero el lugar cuenta con un acceso alternativo que sirve hoy de ingreso y egreso de diversos camiones.

En este sentido también señalaron que desde la Comuna -en una reunión que mantuvieron con personal del área de Ambiente- se les informó que si se cumplían con una serie de requerimientos y normativas de seguridad el lugar podría conseguir su habilitación de trabajo. Frente a esta situación los vecinos se encuentran preocupados y además señalaron que en la zona no se está tomando en consideración el trabajo infantil al que son sometidos niños del lugar y que trabajan a diario allí.

El problema de la contaminación

La instalación de esta chacarita, que terminó convirtiéndose en un basural de considerables dimensiones, ha tornado la vida diaria en un drama que parece no tener fin. El olor nauseabundo, la presencia de innumerables insectos, roedores y todo tipo de alimañas los tiene a mal traer.

Pero además, otro problema fundamental es que se están poniendo en riesgo las napas de agua en la zona. Según comentaron los vecinos, el lugar se caracteriza por tener napas de agua altas -todos tienen agua de pozo en sus viviendas- y la contaminación que está generando este lugar hace peligrar la calidad del recurso hídrico.

Las vías legales

Frente a esta situación desde la Comuna señalaron a MendoVoz que desde el área Coordinación de Ambiente informaron que hace 60 días se procedió a la clausura de la chacarita por anomalías ambientales. Luego, el propietario presentó a la Comuna un Plan de Remediación a partir del cual se elaboró un convenio con la Dirección de Legales, donde el infractor se comprometió en el plazo de 30 días (a partir del 16/05/19) a la limpieza y cierre perimetral del predio. Una vez cumplido ese plazo -de no haber llegado a la metas pactadas- el dueño permitirá a la Comuna, el ingreso para efectuar la limpieza correspondiente.

Cabe destacar que desde el momento de la clausura, según sostienen desde la Comuna no se realizan acciones comerciales ni acopio de materiales en el predio, solamente hay ingreso de camiones que están en el proceso de limpieza del mismo. Ante cualquier duda, denuncia o reclamo desde el Municipio informaron que los vecinos pueden comunicarse al 0800-222-5900 o al 2613657740 (Coordinación de Ambiente).

La fábrica, otro condimento del lugar

Sumado a estos inconvenientes, los vecinos aducen que en la zona opera desde hace años una fábrica de sulfato que genera una contaminación alarmante. Hay personas con problemas respiratorios, se queman las plantas -claro signo de que los gases emanados del lugar son dañinos y peligrosos-. Por lo que piden a las autoridades tomar en cuenta la condición de zona urbana que se le dio al lugar a través de un decreto municipal y trabajar en los posibles traslados de estos centros para poder tener una convivencia armónica.