Fuerte movida para ayudar a un comedor de Perdriel

El espacio contribuye con más de 150 personas por día, por lo que piden alimentos no perecederos, ropa y calzados.
martes, 12 de marzo de 2019 · 07:00

Pancitas Llenas es uno de los comedores comunitarios más antiguo y con mayor población en Luján de Cuyo. Esto se debe a que más de 150 personas se concentran día tras día en este lugar para recibir un plato de comida o una bolsa con alimentos. La fuerte demanda y pedido de ayuda, han llevado a los voluntarios a salir en busca de donaciones.

El espacio liderado por Lilian Leguizamón desde abril del 2000 se volvió con los años en uno de los refugios y comedores más conocido y concurrido de Perdriel, tanto por el almuerzo y merienda que esta mujer de 68 años junto a otros voluntarios les preparó todos los días a quienes golpeaban la puerta de su humilde hogar, ubicado en el barrio Quintana, manzana A casa 19.

Con el paso del tiempo, este acto de amor y de solidaridad se vio modificado por dos motivos. El primero, por el incremento desmedido de vecinos de bajos recursos que recurrió a Pancitas Llenas en busca de comida, es decir, de 50 chicos pasó a ser un grupo de 150 personas de todas las edades. Esto ocurrió en menos de 3 años.

Y, el segundo y más sentido, es que Lilian tuvo que cambiar el plato de comida por una bolsa con alimentos debido a la muerte de uno de sus hijos a principios de 2018. La mujer le contó a MendoVoz que este hombre de 48 años fue uno de los fundadores y pilar del comedor, ya que era la persona que más la ayudaba y que junto a ella le cocinaban a la gente.

“Él siempre estaba dispuesto a ayudar, a seguirme el apunte para buscar nuevos socios que nos donaran alimentos y ropa para la gente, él era mi compañero, y desde que partió me siento muy triste, aunque confío que pronto me recuperaré de esta angustia que me invade gracias a mis hijos y familiares”, relató Lilian a este diario.

A esta triste situación se le sumó la caída de los donantes mensuales con los que contaban. “Antes, las personas me ayudaban mucho, recibíamos bolsas con mercadería, abrigos y calzados, pero eso disminuyó drásticamente. No los juzgo, los entiendo porque sé lo difícil que esta la situación económica en todos lados. Pero cada vez tengo más gente pidiéndome ayuda”, amplió la mujer.

Si bien, el comedor comunitario recibe la colaboración del Banco de Alimentos y algunos socios fundadores, necesitan la ayuda de los mendocinos para poder seguir ayudando a los que menos tienen de Perdriel y alrededores.

“Dentro de poco volveré a cocinar y preparar las vianditas de comida para las personas que se acercan a pedir. Ojalá lo logre”, concluyó Leguizamón.

Es por esta razón que diferentes medios de comunicación y personas han utilizado las redes sociales para pedir donaciones y ayuda económica para Pancitas Llenas. La respuesta ha sido favorable, sin embargo, la demanda es mucha. Es por esto, que quienes deseen colaborar pueden ponerse en contacto con Lilian llamando al 4884894, 4885423 o al 2612453812. Allí, la mujer les indicará de qué forma pueden contribuir con la noble causa.