El megaproyecto chino de cine que compite con Hollywood

Ocupa un espacio equivalente a 200 campos de fútbol y alberga el estudio de cine más grande del mundo.
domingo, 29 de abril de 2018 · 19:56

La Metrópolis del Cine Oriental es un proyecto que llama la atención por sus cifras y sus objetivos: U$S7.900 millones de inversión para convertirse en un nuevo Hollywood.

El complejo se encuentra en Qingdao, una ciudad en el este de China conocida por dar nombre a una de las cervezas más populares en el país, y está capitaneado por el millonario Wang Jianlin, presidente del grupo Wanda.

La empresa, que comenzó en 1988 como promotora inmobiliaria de viviendas, centros comerciales y hoteles, ha ido diversificando su negocio en los últimos años, ahora es la mayor dueña de salas de cine en todo el mundo y ha invertido ampliamente en productoras cinematográficas, así como en el sector del deporte.

"Convertiremos Qingdao en un centro global del cine", declaró hoy el presidente de la compañía durante la inauguración oficial de la Metrópolis del Cine Oriental.

"Convertiremos Qingdao en un centro global del cine", enfatizó Wang Jianlin en su discurso.

En 2013, Wang ya había celebrado una ceremonia para dar inicio a los trabajos de construcción en la que dejó clara que su apuesta iba a ser grande: estrellas como Leonardo Di Caprio, John Travolta y Nicole Kidman desfilaron entonces por una gran alfombra roja desplegada para la ocasión y aplaudieron su plan.

Este fin de semana no fue tal la presencia internacional, pero Wang volvió a tratar de atraer al público extranjero con la promesa de generosos subsidios para las productoras.

Una "ciudad" al servicio del cine

El complejo ocupa 166 hectáreas, cuenta con 30 estudios en funcionamiento, más otra decena en construcción, y parte de él está construido sobre una isla artificial.

Entre ellos se encuentra un plató de 10.000 metros cuadrados, según anunció la compañía en un comunicado.

Wanda quiere atraer productoras locales e internacionales.

Su oferta para la industria del cine además incluye una piscina exterior de 75 metros de largo por 75 de ancho, para rodajes en exteriores e interiores, y toda clase de servicios propios de una ciudad.

Un colegio, un hospital, un teatro, viviendas, hoteles de lujo y hasta varios parques temáticos conforman esta metrópolis, al más puro estilo de Wanda, que ha abierto complejos de ocio similares por todo el país en los últimos años.

Impulso a la industria local

De momento, el complejo albergó el año pasado diez producciones en su fase "piloto". Entre ellas, "Pacific Rim: Uprising" o "Great Wall", protagonizada por Matt Damon, de la productora Legendary Entertainment (en manos de la propia Wanda).

En el pasado, la empresa china se había fijado el objetivo de albergar entre al menos cinco a seis proyectos de Hollywood en su primer año de operaciones, este 2018.

La compañía dice que ya tienen los estudios reservados este año.

No obstante, Wang remarcó en su discurso la importancia de la industria local, aún poco desarrollada pese a que China ya es el segundo mayor mercado del cine del mundo.

"Impulsaremos el desarrollo de la industria del cine de China", manifestó. "Esta es la inversión más grande que la industria de la televisión y el cine ha visto jamás".

Alvin Fu, el consejero delegado de la rama cinematográfica de Wanda, Wanda Studios, explicó en una entrevista con la agencia Efe que la apertura de estos estudios impulsará la calidad de la industria cinematográfica china y su aumento de relevancia a nivel internacional, al tiempo que fomenta la apertura del país a producciones extranjeras, incluso si estas luego no puedan proyectarse en China.

Los subsidios a las productoras no se darán si sus proyectos no han recibido la luz verde por parte de las autoridades chinas, según dijo el presidente del proyecto, Sun Hengqin, en una entrevista con Reuters.

Eso complica la situación para los extranjeros que quieran trabajar en el país, dada la estricta censura del régimen.

Problemas para Wanda

El grupo chino Wanda protagonizó estos últimos años una expansión que acaparó titulares en todo el mundo, con compras como la de la productora Legendary Entertainment, que supuso su desembarco en Hollywood.

Pero su deuda, que según S&P a mediados de 2017 superaba los US$35.000 millones, la obligó a cambiar el paso.

Wang Jianlin ha decidido desprenderse de parte de sus millonarios negocios y reducir sus operaciones de compra en el exterior, pero –como demostró este fin de semana– aún sigue atrayendo los focos.

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