La escultura de Rómulo y Remo adorna la plaza Italia de San Martín

La escultura inaugurada en el departamento del Este fue erguida por el artista plástico Daniel Jiménez.
viernes, 30 de septiembre de 2022 · 07:24

En la Plaza Italia del departamento de San Martín quedó inaugurada una escultura que representa a la Loba Luperca, Rómulo y Remo. El acto, presidido por el intendente Raúl Rufeil, contó con la presencia del cónsul de Italia, Piero Vaira.

Durante la inauguración y puesta en valor de la escultura se explicó que una pieza similar fue donada en 1958 por la Comuna de Roma a San Martín. La obra nunca llegó a destino y, según datos históricos, solo arribaron en tren el capitel y la columna donados.

La escultura inaugurada en el departamento del Este fue erguida por el artista plástico Daniel Jiménez y se realizó en hormigón armado, con pátina en bronce envejecido, a escala real y estilo realista.

“Esta plaza es emblemática y muy visitada por los jóvenes que la usan y también la cuidan, quiero felicitarlos por ello. La colectividad italiana está en el acervo cultural de San Martín y esta es una manera de rendirle homenaje y reconocimiento, a través de esta escultura que simboliza la creación de la capital de Roma. Nuestras dos banderas tienen que estar siempre hermanadas y los lazos deben ser siempre muy intensos”, expresó Rufeil.

Por su parte, el cónsul italiano en Mendoza, Piero Vaira, se mostró emocionado y manifestó: “Es un placer y un honor estar aquí en esta hermosa plaza, con el símbolo de nuestra colectividad. Ahora suman otro símbolo más: La loba. Hoy, a 63 años de que se erigiera la columna romana, es muy agradable estar aquí junto a la gran colectividad italiana de San Martín”.

Finalmente, el escultor Daniel Jiménez comentó que “es muy grande el orgullo que uno puede sentir como escultor y sanmartiniano, no sólo por la obra, sino por lo que representa, por la vinculación con Italia, por la confianza que depositan en mí y por el cariño que le pongo a lo que hago”.

Al artista, la obra le demandó cuatro meses de tareas, que incluyeron los procesos de arcilla, moldes de yeso y posterior hormigón armado.