Racing sumó un nuevo triunfo en la Libertadores

Racing es puntero con cosecha ideal y excelentes perspectivas cuando los octavos de final de la Copa Libertadores se perfilan en el horizonte. Ese saldo luego del 1-0 a Alianza Lima (Perú) bastaría para la plena satisfacción, en el debut copero en un Cilindro vacío por las medidas de restricción de acceso público dispuestas debido a la pandemia de coronavirus.

Pero Racing no se conforma con los números. Porque entiende que la excelencia demanda ajustes y correcciones. El método se aplica y fluye, los movimientos colectivos salen cada vez con mayor naturalidad. Sin embargo, también hay una evidencia: sigue siendo baja la proporción entre generación de ataques profundos y conversión de los mismos.

Esta vez, la relación fue de un festejo entre una decena de ocasiones claras. En poco más de media hora el equipo ya había acumulado seis oportunidades nítidas para convertir, casi todas de procedencia similar y de diversas ejecuciones.

Porque Racing, a diferencia de lo ocurrido en Venezuela, recargó el ataque sobre la derecha, probablemente porque la titularidad de Benjamín Garré sedujo para que la pelota circulara por ese banda. Matías Zaracho contó con cuatro remates, Leonel Miranda con uno e Iván Pillud con el restante.

De frente al arco, en posición oblicua, en el límite del área chica, desde el borde del cuadro grande... Racing no se ató a una sola forma para definir. Antes que la imprecisión, las buenas respuestas de Leao Butrón (43 años) explicaron el cero en un primer tiempo de recuperación alta, progresión en velocidad, pero con desniveles en algunos que, en general, ejercen influencia, como Matías Rojas.

El rival peruano apenas se hizo flexible para juntar más gente cerca de Butrón, porque fue mutando de un 4-4-2 a un 4-4-1-1 para, luego, abroquelarse con cinco volante y un mediapunta delante de los cuatro defensores. No le sirvió de mucho porque, en la segunda parte, además del gol de Nicolás Reniero, se acumularon dos chances de Zaracho (un cabezazo terminó en un poste), una de Rojas y otra de Barbona sin una contraprestación del otro lado, salvo un par de centros que fueron despejados con relativo apuro.

Cuando se reanude la Copa Conmebol Libertadores, una vez que se levante la interrupción temporal, Racing deberá recibir a Nacional de Uruguay, los dos bien arriba en el grupo F, con seis puntos. Racing, está visto, no piensa ceder.