Informe vitivinícola: Faltan buenas noticias

viernes, 17 de mayo de 2019 · 07:00

Por Marcelo López

Especial par MendoVoz

“No va más”, canta el croupier cuando la bola está a punto de caer en el numero de la salvación o el fracaso.

“Chau, no va más” declara algún tango que Eladia Blázquez inmortalizó. Así, más o menos, están los productores vitivinícolas y una industria que parece no encontrar norte o apoyo real para salir.

Las promesas se cumplen a medias, el supuesto quite de retenciones terminó siendo menos que una aspirina y más una maniobra para conseguir un título en los diarios, que medidas ciertas para el sector.

El Gobierno de la provincia no termina de reglamentar el crédito fiscal de los $2 por litro autobloqueado y exportado y el Ejecutivo Nacional, con afán recaudatorio, aumenta la tasa estadística para las importaciones del 0,5% al 2,5% lo que genera un fuerte aumento de costos en productos claves como agroquímicos, corchos, cápsulas y cientos de etcéteras.

En síntesis, lo que faltan son buenas noticias. La preocupación empieza a asomar fuertemente y las calderas comienzan a echar humo, los productores que entregaron su uva a elaboración están más preocupados por lo que recibirán acercándose la fecha de liberación de los vinos y viendo que el precio por litro de contado para los tintos genéricos ya está en los $7, en franco descenso en los últimos tres meses, según los números de los contratos de la Bolsa de Comercio de Mendoza.

Las palabras explican pero los números suelen ser los que dan la magnitud de la crisis, sobre todo cuando se logra ponerlos en perspectiva con cosas concretas. El Observatorio de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas (ACOVI) presentó sobre el fin de semana pasado un informe sobre el poder adquisitivo de los productores medido en litros de vino y cómo se devaluó el poder de compra de este.

Algunos de los datos obtenidos muestran que el sistema en general está llegando al límite, así por ejemplo este año se necesitan 2.369 litros de vino tinto (57% más que en 2018) o 3.041 de blanco (31% más que en 2018) para pagar un mes de trabajo a un obrero común, con 9 a 12 años de antigüedad. En cuanto al combustible, en marzo el productor requiere 99 litros de tinto para cubrir el gasoil asociado a 8 horas de uso del tractor, cuando en marzo del año pasado requería 46 (116% de incremento interanual).

Si hablamos de energía, a marzo de 2019 se requerían 380 litros de vino tinto para pagar la factura eléctrica por uso de riego agrícola, cuando el año pasado se necesitaban 174 litros (118% de incremento). Para el caso del blanco, se precisan 487 litros versus 267 de marzo 2018 (83% de incremento).

Para completar la idea, el Observatorio hace la cuenta de lo necesario para cubrir las canastas básicas medidas por el INDEC “En marzo de 2019, un productor de uva necesitó en promedio 1.182 litros de vino tinto o 1.517 litros de blanco para poder acceder a la Canasta Básica Alimentaria, es decir, para poder cubrir las necesidades básicas nutricionales de una familia tipo y no considerarse indigentes. Eso significa un 123% de aumento para el tinto y un 87% más para el blanco que en 2018”.

Los números no mienten y, como en la ruleta, el canto del “No va más” está cada vez más cerca.

Otras Noticias